A decir verdad mi estado de ánimo no es una maravilla en estos momentos.
Mi casa se ha convertido en lo mas parecido que hay a un hogar de damnificados; colchones en el suelo, cajas de mudanza por doquier y apagones cada 5 minutos, -literalmente-.
Además de que me afectan muchísimo los cambios de temperatura al punto de que mis tardes han dado lugar a múltiples llantos de desesperación por culpa del calor.
Podría decirse que el regreso a las clases empeoraría aún mas las cosas, pero en realidad las espero con ansias.. Creo que es porque necesito centrar mi mente en otra cosa y olvidar por un tiempo todo lo que me rodea.
Por otra parte está mi situación sentimental que no deja agobiarme, ya sea por que al tratar de evitar el tema hace que duela mas con el paso de los días o por las reapariciones repentinas de algunas personas a mi vida.
Sí, al parecer las cosas han dado un giro importante las últimas semanas lo que me hace desear volver a mis queridas tierras andinas mas que nunca. Aunque no todo está perdido, siempre encuentro la manera de escaparme de la realidad pegada a un libro el día entero y a veces, intensificando mis prácticas con la guitarra fielmente... Así que, poco a poco las cosas mejoran.
Situación actual: Al borde de un colapso mental.
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