jueves, 19 de diciembre de 2013

Away.

Mi cabeza da vueltas.
El insomnio sigue allí dándome cosas en las que pensar. He perdido la noción del tiempo.
La ansiedad y los nervios me van consumiendo cada vez un poco más.
Siento que me estoy volviendo loca , aunque eso lo he sentido siempre.

No puedo explicar lo feliz que me hace estar lejos de todo por un tiempo. El clima frío me ha sentado bien. La comida está de sobra y cada día me propongo comer algo diferente y aunque sé que aumentaré unos cuantos kilos para el año que viene soy incapaz de sentir culpa por eso.
Estoy intentando tomarme las cosas de la manera más positiva que pueda y admito que he estado a punto de decaer más de una vez en este corto tiempo. Ahora que lo pienso, mis intentos de suicidio no han sido más que una manera de callar los pensamientos en mi cabeza y estoy segura de que sí pongo un poco más de mi parte lograré dejar ese mal hábito pronto. O eso espero. “Debo procurar no venirme abajo sin parar para no convertirlo en una mala costumbre...” Leí esa frase hace poco en un libro (Comer, rezar, amar de E. Gilbert) con el que me siento muy identificada. Digamos que me siento mejor sabiendo que no soy la única que ha pasado por esta clase de momentos grises en su vida, aunque siendo sinceros ¿quién no ha caído en una depresión alguna vez?.
Los sentimientos son algo inevitable, lo único que podemos cambiar es nuestra conducta y la manera en la que nos enfrentamos a estas situaciones.
En fin, no se qué haré cuándo llegue enero y tenga que darle la cara de nuevo a mis problemas, ni siquiera se qué haré con mi vida en las próximas veinticuatro horas, pero por ahora nada de eso importa. Debo enfocarme en vivir el momento, en hacer las cosas que me gustan, en comer lo que se me antoje, en reencontrarme a mi misma y buscar la manera de ser feliz nuevamente. 

1 comentario:

  1. Con la reflexión final en paln "carpe diem", "don't worry, be happy" & "hakuna matata" ya lo has dicho tú todo ;) Si te soy sincera... yo también he pensado más de una vez en suicidarme, creo que a todos se nos pasa por la cabeza al menos una vez en la vida, pero al instante borré esa idea de mi mente porque eso sería dejarme vencer, rendirme y cederle la victoria a la adversidad. Y no. Antes prefiero caer y tener que levantarme mil veces a darme por vencida. Pa chula la vida y sus caprichos... ¡chula yo! Y con una par de buenas razones saldré de esto como como sea. Eso es lo que me digo siempre y hasta ahora... no me ha ido del todo mal ;)

    Pd: ¡Volví después de más de dos meses de ausencia! Pásate si quieres ^^

    Un abrazo! :3

    ResponderEliminar

¿Qué opinas?