Relato corto: "botón de reinicio"

Ella estaba destrozada.
No podía sacarse el nombre de aquel con el que tenía tanto tiempo hablando, y aún dolía, eso seguro. Cada mañana, en su camino al instituto, no podía dejar de fijarse en una de esas tiendas de repuestos para automóviles que se llamaba justo igual que él. Ella no creía en coincidencias pero ésta tenía que ser una. Todas las mañanas al pasar por allí terminaba siempre pensando en él y se le hacía tan difícil no poder escribirle.
Teléfono celular en mano, buscar chat, se abre el teclado y escribe: hola, buenos días! Nunca se decidía a pulsar la tecla de enviar y terminaba apagando el móvil.
Pero ese era un día diferente, ella lo sentía en el aire. Se acordaba de cómo el inicio de un nuevo año escolar sugería probar cosas nuevas, aunque estuviese ya en el segundo período.
Había alguien más.
Ese muchacho que parecía salir de la nada con sus chistes incoherentes y su retorcida sonrisa. Llevaba el cabello siempre despeinado y tartamudeaba un poco al hablar. Ella había hablado con él unos días atrás, se quedó impactada de tener tantas cosas en común con alguien que parecía ser millones de veces más extrovertido que ella. A ambos les apasionaba el frío y la lectura, los aromas, la música de los noventas, el color negro en cada prenda de vestir, parecían poder terminar todo lo que el otro decía.
Y allí estaba ella, tomando de su pequeña biblioteca personal una revista muy cliché de chismes, tratando de encontrar la forma de hablar con él más seguido "paso número 1: intenta sentarte cerca de el individuo en horas de clase, nota: no te distraigas dibujando en tu cuaderno, dí algún comentario esporádico y trata de sacar conversación." Sí, se leía muy fácil de hacer para alguien que no fuese tan cerrada y nerviosa como ella lo era.
En fin, estaba decidida a aplicar eso ese día, el día en que el cartel de la tienda de repuestos dejó de importar.
El día en cuya tarde recibió el primer mensaje de texto del muchacho tartamudo con bonita sonrisa...

-mariana-